El pasado sábado 18 de julio tuvo lugar dentro del Festival de Músiques de Torroella de Montgrí, el concierto anual dedicado a la memoria de Ernest Lluch. A través del reconocido conjunto Ensemble Zefiro, que dirige el también extraordinario oboista Italia Alfredo Bernardini, el público asistente que llenó la iglesia de Sant Genís, gozó las obras de Händel y los hermanos Josep y Joan Baptista Pla. El programa de la velada incluía una pieza que el mismo Bernardini descubrió recientemente en la República Checa, el Concierto en do mayor para oboe, dos trompas, cuerda y bajo continuo, del cual se ofrece la primera audición en tiempos modernos. El programa se completó con dos suites de la celebérrima Música acuática de Händel, que sirvieron para materializar esta supuesta reunión entre Händel y los hermanos Pla, que, hoy por hoy, sólo podemos calificar de apócrifa. Una velada musical de gran calidad, que singulariza el Festival de Torroella, que año tras año consolida este homenaje anual a Ernest Lluch.