Con ‘Europa en combustión: nuevas prioridades’ la Secretaria de Estado de Asuntos Externos y para Iberoamérica y el Caribe, Cristina Gallach, y
la rectora del College of Europe y Alta Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad (2014 hasta 2019).
Federica Mogherini, clausuraron el ciclo de diálogos de este año dedicado a ‘Un mundo en combustión’ en un acto semi-presencial, con presencia de público de acuerdo con el cumplimiento de la normativa vigente, y con las intervenciones de Gallach desde el Palau Macaya de Barcelona y de Mogherini desde la sede del College of Europe, en Brujas (Bélgica). El acto contó con la participación inicial de Anna Terrón (Directora de la Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas (FIIAPP)) como introductora del acto y de las ponentes, y concluyó con las palabras del presidente de la Fundació Ernest Lluch, Joan Majó quien resaltó la excepcionalidad del ciclo de este año, marcado por la Covid-19 y por la fuerte huella del legado de Lluch, veinte años después de su asesinato.
La Unión Europea vive sumida en una profunda crisis multicausal desde hace una década. Por todo ello, algunos vaticinan un colapso del modelo económico, social y cultural europeo. Otros, en cambio, saben ver la oportunidad para progresar en grandes reformas estructurales. Hay quien, por el contrario, haría una enmienda a la totalidad y construiría una nueva Unión Europea. Con todo ello, la crisis de la Covidien-19 ha reconfigurado todas las políticas previstas para este mandato 2.019 hasta 2.024, que apenas hace un año se puso en danza. Estamos ante una Europa en combustión?
Con este punto de partida Cristina Gallach situó de entrada los retos en materia de cohesión y de gestión de la crisis de la Covidien-19, entendiéndolos también como una oportunidad de proporcionar y garantizar el bienestar necesario entre los ciudadanos de la Unión . Por ello se mostró convencida de que con la vacuna y la lucha contra la Covidien-19, Europa saldrá reforzada. Sin embargo alertó de las dificultades internas que tensionan el logro de acuerdos más amplios y consensuados que ayudarían a proyectar mejor la gran tarea que se impulsa desde la UE, así como agilizar las ayudas y estímulos económicos necesarios. Mogherini hizo una extensa y precisa panorámica de la situación geopolítica y geoestratégica, remarcando los logros alcanzados en materia de integración y de resolución de conflictos, a la vez que mencionaba los retos pendientes en política exterior, ya que venimos de unos años marcados por el Brexit y los cambios profundos en política exterior de la administración Trump, cuestiones que ahora, con la presidencia de Biden podrían cambiar notablemente.
El diálogo reunió conocimiento experto y voluntad divulgadora de parte de dos ponentes de lujo que tejieron una conversación cómplice a pesar de ciertas dificultades técnicas ajenas a la organización.
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