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Se presenta el libro correspondiente a la VI Beca de Investigación Ernest Lluch

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21 de diciembre de 2011

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El Acto Anual Becas Ernest Lluch de este año reunió a una cincuentena de personas y constó de dos partes. Una primera centrada en la Beca Ernest Lluch de Investigación del Patrimonio Musical y una segunda centrada en la Beca de Investigación Ernest Lluch. El acto contó con la presencia del director del Museu d’Història de Catalunya, Agustí Alcoberro y estuvo conducido por el vicepresidente de la Fundación Ernest Lluch, Lluís Maria de Puig, quien ofreció unas palabras iniciales centradas en las dificultades económicas actuales y en la necesidad de seguir fomentando la investigación en los campos de la Música y de la Historia, dos de los principales centros de interés de Ernest Lluch. En este sentido hizo saber que la Beca de Investigación Ernest Lluch pasa a ser una beca bienal y quel’any 2012 se convocará la octava edición de esta beca. Acto seguido cedió la palabra a Jordi Maluquer, patrono y miembro de la Comisión Cultural de la Fundación Ernest Lluch quien anunció que después de tres becas musicales concedidas, la labor de la Fundación ha dado frutos y ha permitido impulsar tres investigaciones en el entorno de compositores catalanes como son Terradellas, Milans y Andreví. En cuanto a Domènec Terradellas, se anunció que se están ultimando las negociaciones para impulsar su publicación y sobre Milans anunció que su obra será interpretada en el próximo Festival de Músicas de Torroella de Montgrí. Por último y en relación a la vida y obra de Andreví comunicó que ya se dispone de la investigación realizada por musicólogos Antonio Ezquerro y Gloria Ballús, que hicieron entrega de la misma y pronunciaron unas palabras dedicadas a uno de los músicos catalanes más prolíficos en el reinado de Fernando VII.



La segunda parte del acto fue una calurosa dedicatoria a la investigación histórica, a los jóvenes investigadores y a la Cataluña post-Decreto de Nueva Planta y al constitucionalismo y liberalismo. Los catalanes en las Cortes de Cádiz así como el legado de los  "Papiol" y "Rubinat" de Vilanova i la Geltrú fueron cuidadosamente presentados. No en vano este tema es el que centró en parte la glosa que el profesor y prologuista de la obra, Joaquim Albareda, hizo del libro Tradición constitucional e historia nacional (1.808 a 1.823). Legado y proyección política de una saga catalana, los Papiol, de Jordi Roca y Vernet. El autor, galardonado en 2009 con la VI Beca de Investigación Ernest Lluch dirigió unas palabras de agradecimiento y de reivindicación del pensamiento historiográfico y de la necesidad de promover la investigación en campos como la historia, tan alejado de los parámetros productivos actuales pero al mismo tiempo tan necesario para nuestra sociedad. Obra y discurso, estuvieron perfectamente en sintonía con el público asistente, y que dio pie a la última parte del acto en la que el también joven historiador, Iván Armenteros, entregó la investigación correspondiente a la beca concedida el año pasado y que será publicada el próximo año.



Sinopsis: La génesis y la interpretación de la Constitución de Cádiz (1812) no ha despertado demasiado interés entre los historiadores catalanes del siglo XX a pesar de que desencadenaran olas de pasiones a favor y en contra entre los catalanes de la época. La historia de "los Vilanova", Francesc de Papiol, diputado en las Cortes de Cádiz, y la de sus sobrinos Benet y Marià Rubinat sirve de hilo de Ariadna para no perderse en el laberinto de los sueños catalanes para reformar la monarquía borbónica y la naciente nación liberal española. Los padres de la Constitución fueron menos liberales que sus intérpretes inmediatamente posteriores pero todos ellos utilizaron la historia para definir el alcance del cambio político y social que suscitó la promulgación de la Constitución. Ese historicismo político era nuevo pero no la fascinación por la historia que se había cultivado entre los principales centros de conocimiento del último tercio del siglo XVIII.



La familia Papiol representa como los vestigios del austriacismo se transformaron en el anhelo de recuperar la historia política de Cataluña a través de la recopilación de libros y documentos de todo tipo. La formación de la biblioteca familiar repleta de obras de historiadores y juristas catalanes de los siglos XVI al XVIII se convierte en capital para entender la respuesta catalana a la crisis de la monarquía desencadenada a raíz de la invasión de las tropas napoleónicas. Francesc de Papiol era bisnieto del alcalde de Vilanova, Joan Papiol y Raventós, capturado y muerto en el campamento de las tropas borbónicas que asediaban Barcelona el verano de 1714, y fue el tío de los hermanos Rubinat protagonistas del intento de asimilación de la Diputación Provincial de Cataluña en la antigua Diputación del General, abolida tras la derrota austriaicista de 1714. Si Francisco soñó en una reforma ilustrada de la monarquía borbónica que recogiera las peticiones de los catalanes, sus sobrinos creyeron que la nación liberal española les ofrecía la oportunidad de redefinir las relaciones entre Cataluña y la monarquía.





Sobre el autor: Jordi Roca Vernet, (Barcelona, ??1976). Investigador postdoctoral en la Universidad de Warwick. Premio extraordinario de doctorado en la Universidad Autónoma de Barcelona, ??su investigación doctoral ha sido reconocida por el Instituto de Estudios Catalanes con el premio Jaume Vicens Vives (2010). Ha publicado el libro La Barcelona revolucionaria y liberal: exaltados, milicianos y conspiradores, y varios capítulos de libro y artículos en revistas especialitzades.Forma parte del Grupo de Investigación de Historia del Parlamentarismo y sus principales líneas de investigación son la historia del primer liberalismo y de las revoluciones de la primera mitad del siglo XIX.